A pesar de todo, el hombre, pequeña parte de tu creación, quiere alabarte. Tú mismo le incitas a ello, haciendo que encuentre sus delicias en Tú alabanza, porque nos has hecho para Ti y nuestro corazón está inquieto mientras no descansa en Ti.
(San Agustín. Confesiones 1,1,1).
Hechos para Ti.
febrero 24, 2015 por Federico.
Deja un comentario